Vocación: Fe, aventura, decisión
La vocación a la vida religiosa solo puede ser entendida desde la fe, pues es así también la llamada; llamada en la cual están todos invitados a responder. Esta vocación como digo y repito debe fundamentarse en la fe pues para responder es necesario conocer al "Novio" o la "Novia"(Jr 7, 20) DIOS
La vida religiosa es el camino que hace x o y persona para responder a un proyecto que en este caso lo podríamos resumir en Lc 4,18 es un encaminarse hacia un vida plena, de realización constante, en el encuentro cotidiano con el prójimo.
La vida religiosa no debe entenderse como un sacrificio, es en si un entrega voluntaria de nuestra vida al ya antes mencionado proyecto de Dios. Es un vivir como cualquier otro en el sentido que uno se siente realizado como en cualquier otra vocación como por ejemplo el matrimonio. Igual que otras vocaciones esta en específico también tiene sus implicaciones.
Lo segundo que atribuiría a este llamado es la aventura, hay que estar constantemente dispuestos a vivir la aventura, estar dispuestos a ir donde nadie quiere ir, ha estar con quien nadie quiere estar. Esta aventura es fundamental pues en cada aventura que se viva, si estamos despiertos veremos al Espíritu de Dios y su santa operación.
Diariamente escucho por las calles a la gente diciendo o refiriéndose a los religioso de manera rara, pues la gente dice que la vocación es un predestino de Dios, que Dios prácticamente ha elegido a x o tal persona para la VR desde antes de su concepción, prácticamente estamos diciendo que Dios nos condiciona, osea viola nuestra libertad y no nos deja la opción de decidir de ser libre de decidir si o no por este camino. Yo lo que digo y lo creo es que este llamado es para todos, pero no todos están dispuesto o con los oídos y ojos abiertos, no todos están dispuestos a decir si; por este motivo pienso siento y lo creo que la vocación es un "DECISIÓN" que se actualiza cada instantes.
Yo pienso, que la vida religiosa(circunscrita a una religión X)es una opción de vida para cualquier persona, siempre y cuando crea en el dogma. Sin embargo, hay muchos miles de personas que no comulgamos con ruedas de carreta (religiones) y vivimos una vida de soledad, sin hijos ni esposas,y somos mucho más espirituales que aquellos que viven de religiosos o la gente común. Yo lamento profundamente no encontrar en la vida común y corriente grupos humanos o comunidades que vivan la espiritualidad a un alto nivel, y que asimismo no sean sectas ni religiones que imponen un prisma de apreciación espiritual pre-configurado. La ciencia y la técnica,la voluptuosidad de los placeres de los sentidos, alejan al ciudadano común de considerar la vida religiosa por eso cada vez hay menos religiosos.
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